Era el final. Estaba como un pintor al que se le acabó la pintura, como un escritor al que se le rompió la pluma. Era un chico al que se le habían acabado las fuerzas para amar.
Ya no sabría si podría volver a hacerlo, si podría querer de nuevo después de todo lo que había hecho por ella y no había funcionado. Si, después de todo el amor que sentía, aún le quedaba corazón para alguien más.
Lo que de verdad desconocía, es que detrás de cada "metedura de pata" había una sonrisilla tímida, unos ojos que brillaban solo con su presencia y un secreto que nadie debía saber. Esa chica que escondía sus sentimientos sin saber que él moría por demostrar los suyos.
Entonces, ella decidió dejar de tener el corazón escondido y él decidió esconderlo. La chica se acercó llena de esperanza y él le respondió serio y distante. En ese momento, ella volvió a esconderse en su caparazón y ninguno de los dos pudo evitar llorar por lo que creían perdido. Realmente, ese fue el principio del final.
Hola preciosa, te he nominado al ''Book Tag Liebster Award'' http://ellibrodekristenmadness.blogspot.com.es/ Un abrazo grandisimo
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