Era el final. Estaba como un pintor al que se le acabó la pintura, como un escritor al que se le rompió la pluma. Era un chico al que se le habían acabado las fuerzas para amar.
Ya no sabría si podría volver a hacerlo, si podría querer de nuevo después de todo lo que había hecho por ella y no había funcionado. Si, después de todo el amor que sentía, aún le quedaba corazón para alguien más.
Lo que de verdad desconocía, es que detrás de cada "metedura de pata" había una sonrisilla tímida, unos ojos que brillaban solo con su presencia y un secreto que nadie debía saber. Esa chica que escondía sus sentimientos sin saber que él moría por demostrar los suyos.
Entonces, ella decidió dejar de tener el corazón escondido y él decidió esconderlo. La chica se acercó llena de esperanza y él le respondió serio y distante. En ese momento, ella volvió a esconderse en su caparazón y ninguno de los dos pudo evitar llorar por lo que creían perdido. Realmente, ese fue el principio del final.
Siempre puedes volar y, cuando lo haces, ves todo desde fuera. Yo vuelo para contarlo.
miércoles, 12 de octubre de 2016
domingo, 9 de octubre de 2016
¿POR QUÉ NO ESTOY ESCRIBIENDO?
La respuesta es simple: 2º DE BACHILLERATO. Este curso me está haciendo buscar tiempo de donde no lo hay y estudiar todo lo que no estudié en la E.S.O
Os prometo que intento hacerlo, pero es que llega el fin de semana y no me apetece nada más que dormir o salir. Lo he intentado, ayer mismo me puse delante de mi cuaderno a ver si salían ideas, pero no. Lo único que se me ocurrió escribir es esto (que lo más seguro es que no os interese) porque estoy tan cansada y tan desanimada...
Este fin de semana me he puesto incluso mala porque necesitaba dormir, necesitaba parar y, en cuanto me levantaba, me mareaba y el dolor de cabeza no se me quitaba. En serio, lo he pasado fatal y no sé cuando mi cuerpo y me mente se querrán acostumbrar a la que está siendo la peor "vuelta al cole" de mi vida. Es más, ya estoy empezando con los exámenes y me está costando muchísimo concentrarme y ponerme a estudiar, cuando NUNCA me había costado centrarme en eso. Estoy supercolapsada y no es porque no me organice o no tenga tiempo para todo, sino que cuando encuentro un hueco de parar y sentarme tranquila lo que menos me apetece es hacer algo. Es que ya no estoy ni viendo serie, ni leyendo, ni escribiendo... y como os dije antes, si me pongo mala ya ni salgo. No comprendo por qué ni pretendo excusarme por no escribir, no lo hago porque no tengo ideas ni me apetece. ¡Pero es que tengo la cabeza llena de cosas que hacer!
Así que lo siento, no sé si esta semana la inspiración y las ganas vendrán a visitarme, por lo que no puedo prometer nada. No sé si me conseguiré adaptar pronto al ritmo de este curso (espero que sí porque si no voy a explotar) y por fin cumplir lo que organizo. Y, si alguien ha leído esto, ha llegado hasta aquí y ha aguantado todo mi rollo y mi estrés, GRACIAS. Espero que lo entendáis y poder compensaros pronto toda esta entrada tan aburrida. ¡Nos leemos!
Os prometo que intento hacerlo, pero es que llega el fin de semana y no me apetece nada más que dormir o salir. Lo he intentado, ayer mismo me puse delante de mi cuaderno a ver si salían ideas, pero no. Lo único que se me ocurrió escribir es esto (que lo más seguro es que no os interese) porque estoy tan cansada y tan desanimada...
Este fin de semana me he puesto incluso mala porque necesitaba dormir, necesitaba parar y, en cuanto me levantaba, me mareaba y el dolor de cabeza no se me quitaba. En serio, lo he pasado fatal y no sé cuando mi cuerpo y me mente se querrán acostumbrar a la que está siendo la peor "vuelta al cole" de mi vida. Es más, ya estoy empezando con los exámenes y me está costando muchísimo concentrarme y ponerme a estudiar, cuando NUNCA me había costado centrarme en eso. Estoy supercolapsada y no es porque no me organice o no tenga tiempo para todo, sino que cuando encuentro un hueco de parar y sentarme tranquila lo que menos me apetece es hacer algo. Es que ya no estoy ni viendo serie, ni leyendo, ni escribiendo... y como os dije antes, si me pongo mala ya ni salgo. No comprendo por qué ni pretendo excusarme por no escribir, no lo hago porque no tengo ideas ni me apetece. ¡Pero es que tengo la cabeza llena de cosas que hacer!
Así que lo siento, no sé si esta semana la inspiración y las ganas vendrán a visitarme, por lo que no puedo prometer nada. No sé si me conseguiré adaptar pronto al ritmo de este curso (espero que sí porque si no voy a explotar) y por fin cumplir lo que organizo. Y, si alguien ha leído esto, ha llegado hasta aquí y ha aguantado todo mi rollo y mi estrés, GRACIAS. Espero que lo entendáis y poder compensaros pronto toda esta entrada tan aburrida. ¡Nos leemos!
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